El momento de pintar una habitación suele ser uno de los más divertidos y que más emocionan a las personas. Solamente imaginar cómo esta una pared y cómo se verá en las próximas horas llena de emoción al pintor. Pero hay un pequeño problema con el que nadie quiere toparse.  Resulta que a veces no solo la pared termina pintada, sino que salpicar pintura es un accidente común.

Sin darnos cuenta, las brochas y rodillos pueden salpicar pintura y terminar en el suelo o en muebles.  Y en ocasiones para cuando vemos el daño, la pintura ya está seca y es difícil de remover.

Evita salpicar pintura en áreas no deseadas, es más fácil de lo que piensas. No necesitas un tipo de brocha o equipo especial, puedes hacerlo con cosas que tienes a la mano en casa.

Lee estos tips para no salpicar pintura.

• Usa una caja de cartón

Al abrir la lata, colócala dentro de una caja de cartón y así lograrás que cada gota que escurra al salir de la lata, caiga sobre la caja y no sobre el suelo u otros muebles. Debes asegurarte que esta sea lo suficientemente grande, como una caja de zapatos o un paquete que hayas comprado anteriormente.

• Pega plastiprotector o periódico con cinta

Utiliza cinta para pegar plastiprotector o periódico  o a todas las superficies que quieras proteger de salpicar pintura, sobre todo el suelo y los muebles. Al pegarse con la cinta, ni el viento ni tus pasos moverán el papel, brindando protección completa a las superficies.

• Coloca una cuerda o liga sobre la boca de la lata

Sin duda uno de los mejores remedios para evitar las salpicaduras. Coloca una cuerda o una liga a lo largo de la lata, de manera que esta pase por la boca de la lata. Así, cuando humedezcas la brocha, puedas remover el exceso de pintura sobre la cuerda o liga, evitando que esas gotas caigan en donde no quieres pintar.

• Si usas rodillo, cubre la charola con plástico o aluminio

Es menos probable que un rodillo gotee por sus mismas características, pero no es imposible, por lo que también debes tomar las mismas precauciones con este método.

Una buena idea es cubrir la charola de la pintura con un trozo de papel aluminio o plástico para que la pintura se concentre ahí y sea más fácil removerla al terminar. Con esto, reducirás el riesgo de cualquier accidente que puedas tener con la pintura.

• Cubre los bordes y zonas pequeñas con cinta para no salpicar pintura

Al pintar, también puedes salpicar pintura en las paredes sin darte cuenta.   Sobre todo en las zonas más difíciles, como las esquinas o bordes.  Te recomendamos cubrir con cinta estas áreas para poder trabajar sin salpicaduras.

Al finalizar de pintar elimina la pintura seca de tus brochas para que te sirvan para la próxima ocasión