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Seguramente has escuchado acerca del uso de la cal dentro de los proyectos de construcción para la preparación de las mezclas de albañilería, debido a que tiene una amplia variedad de aplicaciones, por lo que casi puede considerarse como un elemento indispensable durante y después de una obra de construcción.
En los acabados y restauración de un patrimonio, la cal tiene una importante función con los aplanados y recubrimientos de muros, pero ¿sabes cuáles son los tipos de morteros con cal que existen en la construcción? Bien, pues en la nota de hoy hablaremos acerca de esta técnica muy importante.
¿Qué es un aplanado o recubrimiento?
Lo primero que debemos saber es que se denominan aplanados o recubrimientos a la técnica de aplicación de los morteros (mezclas) que sirven para la protección o acabado de superficies internas o externas.
Tipos de morteros
Según sea la función del tipo de acabado o recubrimiento, la preparación de la mezcla puede ser:
- Mortero cal arena
- Mortero arena cemento
- Mortero cemento, cal y arena
Para cada uno se debe realizarse un proceso diferente para sus preparación y aplicación, que a continuación, te explicaremos:
Preparación y aplicación
Mortero con cal y arena
Este tipo de mezcla de cal con arena suele utilizarse para revestimiento continuo como son los revoques, muros de mampostería, y/o ladrillos, entre otros.
En enlucidos se utiliza una porción de cal por una de arena, a diferencia de los revoques se utiliza una parte de cal por dos de arena.
En muros de mampostería se emplea una parte de cal por cuatro de arena, mientras tanto, en muros de ladrillo, usa una de cal y tres de arena.
No olvides que, la aplicación correcta de cualquiera de estas técnicas de mortero te ayudará a conseguir mejores resultados; flexibles, duraderos y resistentes. Para garantizar la estabilidad y adherencia de la mezcla a utilizar en el revestimiento, toma en cuenta el material de soporte, de ser necesario deberás someterlo a tratamientos previos.
Mortero arena y cemento
Este tipo de mezcla de arena y cemento es utilizada normalmente para realizar pulidos y revoques impermeables, además, ayuda a pegar en muros, ladrillos, baldosas en interiores o exteriores, en muros sin carga y en general mampostería, su mezcla suele ser una parte de cemento por seis, hasta por diez de arena.
La mezcla de morteros para revoques impermeables y pulidos, mejor conocidos como bruñidos suele constar de una parte de cemento y otra de arena. A diferencia de la mezcla para morteros de muros cargados, en donde se recomienda utilizar una parte de cemento y cinto de arena para mejor adherencia y durabilidad. Este tipo de morteros es más económico y de fácil aplicación.
Mortero cal, cemento y arena
La particularidad en este mortero es su vasta plasticidad para cualquier trabajo, desde en el ramo de la construcción hasta en trabajos artesanales.
Cuando se trata de reparar fisuras, esta mezcla es ideal, gracias a que la cal retiene la humedad por más tiempo y asegura la calidad de este trabajo.
Las porciones dependerán de la función de su uso que a continuación, te las compartimos, así que no olvides las porciones, esto te asegurará una excelente calidad y durabilidad en cualquier trabajo de albañilería.
Muros impermeables: Una porción de cemento, una de cal y seis de arena.
Obras corrientes: Una parte de cemento, dos de cal y seis de arena.
Muros poco cargados: Una de cemento, una de cal y ocho de arena.
Cimientos: Una porción de cemento, una de cal y diez de arena.
Cómo aplanar el revestimiento
Revestimiento de cemento y cal en un muro:
Para realizar el revestimiento con un mortero de cemento con cal en los muros, la técnica más usada es pintar el muro con una “lechada” (enjalbegar), este acabado es impermeable y ayuda a impedir que la radiación solar caliente de más la estructura. Para esta técnica se recomienda enjalbegar por lo menos una vez al año.
Revestimiento de cemento, cal y arena en un muro:
Otra de técnica es aplicar un mortero con cemento, cal y arena con espesor de cinto o siete milímetros en muros. Para la mezcla debes usar, una porción de cal, más dos volúmenes de arena, preferentemente fina, y una porción de agua; dependiendo el manejo de la mezcla, puedes ir aumentando la cantidad de agua. Para su aplicación, la masa se debe lanzar con una llana contra la pared, y alisar rápidamente con la misma.
Revestimiento de cemento y arena:
Ya sea en interiores o exteriores, para realizar un mortero de cemento y arena, debes primero deberás definir el espesor, normalmente suele ser de un centímetro, posteriormente procederás a picar la superficie de los castillos y cadenas, esto permitirá una mejor adherencia de la mezcla.
En esta técnica, la mezcla deberá estar suficientemente espesa para tener un buen agarre sobre la superficie a revestir, pero lo suficientemente líquida para su manipulación.
Al igual que el mortero anterior, con una cuchara de albañil procede a lanzar la mezcla sobre el muro, y con una pala o polín de madera procede a retirar los excesos.
Antes de continuar con el aplanado, el repellado deberá dejarse secar por lo menos dos días. Para esta parte, la mezcla debe ser más homogénea y fina que la del repellado.
Para lograr una superficie uniforme, el secreto consiste en realizar movimientos circulares con una llana metálica o de madera.
Para cualquiera de estas técnicas deberás realizar una preparación previa de la zona que vas a recubrir, quitando todo el exceso que pudiera tener de pintura o polvo, para posteriormente humedecerla con agua, esto ayudará a mejorar su adherencia.
Con esta información, es momento de pones manos a la obra y realizar cualquier aplanado o recubrimiento que tengas pendiente.
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