El agua en nuestra cotidianidad, es vital. La necesitamos para beber, cocinar, para asearnos y mantener limpio nuestro hogar y enseres domésticos, entre otros usos.
Una de las preguntas que en ocasiones nos surgen es: ¿el agua de mi hogar es de calidad?, si bien cada país cuenta con una legislación para el manejo de aguas, no está de más brindarle una tratamiento adicional para mejorar su calidad y por ende, cuidar nuestra salud.
Existen diversos procesos para purificar el agua, entre los que podemos destacar: filtros de arena, el carbón activado y el suavizador. A continuación te explicamos brevemente en qué consiste cada uno:
Filtros de arena
Su uso general es la filtración de agua con cargas de contaminantes de medianas a bajas. En éste, el agua pasa a través de un lecho filtrante de arena, y las partículas suspendidas que lleva el agua son retenidas durante su paso.
Carbón activado
Su función principal, es la eliminación de cloro y elementos orgánicos que el agua puede poseer. Funciona similar al filtro de arena, con la diferencia de que el lecho por el que pasa el agua es de carbón activo. Se utiliza comúnmente para el tratamiento de aguas subterráneas.
Suavizadores
También conocidos como ablandadores de agua, son equipos que eliminan la dureza del agua a través de descargas iónicas. Su composición, en general es de un tanque con resina catiónica, una válvula de control multipuerto y un tanque de salmuera adyacente.
Hoy en día, existe una amplia gama de filtros para purificación del agua acordes a cada necesidad. Elige el que consideres más conveniente para tu hogar.